Cincuenta años de Ryokan











Nubes de cambiantes formas
son la fortuna y los honores de este mundo.

Cincuenta años han pasado ya
como si fueran un sueño.

Cae la lluvia ,
en mi ermita de techo de paja,
sin nada que hacer,
me envuelvo en mi kesa
y me acodo apaciblemente en la ventana
viendo pasar el tiempo.

Comentarios

Entradas populares de este blog

Camino de un año nuevo- Patrick Pargnien

El Vaivén, sesshin de verano en la Casa de Espiritualidad de Artieda

Agenda dojo zen Genjo Pamplona/Iruña 2024-2025