Justo después de volver, Eukeni Callejo

 

  

                    Justo después de volver de Pamplona me dije: de hecho creo que me olvidé de contar el final de la historia de la montaña y la niebla, es decir que la niebla al cabo de unos minutos...... volvió y lo sumió todo en la "neblitud".

 (Se refiere a la historia que contó cuando subiendo a una montaña entre la niebla, de pronto se disipó y pudieron ver la cima, momento de profundo silencio, momento que duró hasta que comenzaron a hablar de ello).

     Es cierto que no es el final feliz que nos hubiera gustado pero es muy interesante pues nos muestra que:

     - nuestro mental de homo sapiens sapiens (complejo y eficiente que nos ha permitido sobrevivir y adaptarnos) tiende a ocupar todo nuestro espacio de conciencia y nuestro "verdadero rostro, el de antes del nacimiento de nuestros padres" queda oculto en la neblitud.

     Nuestra práctica consiste en eso: Dejar pasar las nubes, la niebla (utilicemos la imagen que más nos gusta) y dejar aparecer Eso, Ello, Cela (en francés) que siempre ha estado ahí.

     Así explicado parece parece un poco simple, tonto y es que sólo es entendible desde la práctica, de la misma forma que para poder comprender la expresión; ¡Ah,por fin en casa! ¡¡¡¡Hay que entrar en la casa!!!!

       Un recuerdo muy grato y sorprendente del ambiente del Dojo, Dojo caverna, Dojo materno, Dojo de luz silenciosa y de sombra elogiada y sin elogio, amistoso, sincero, solidario, kishin, roshin y daishin bailando juntos. Dojo de despertar, complicidad y guiño. Aquello que fue plantado por Muga (no ego??) dio el fruto de la ligereza y la libertad.

                                                                          Consol Bofill

  Amén. 

 

 Eukeni Callejo